"CRONICA DESDE EL INFIERNO"......(Cántabro)

El pasado sábado el “demonio” Enrique (es el que me metió en el infierno) y yo, estuvimos en la localidad cántabra de Cabezón de la Sal, para afrontar un nuevo reto llamado el “Infierno Cántabro”. Había diferentes modalidades y nosotros nos decidimos por la carrera de 46 kms. Lástima que nuestros “compis” Txelu (J.L. Monje) y Héctor, que en un principio se habían decidido a venir, no pudieran estar por diferentes motivos. Txelu por que está en pleno proceso de recuperación de sus pies que le están dando mucha guerra, y Héctor que se está comiendo los libros preparando su “opo” que va a aprobar en Junio.

A las 08,00 am se dio la salida, todos con una sonrisa de oreja a oreja, que tan sólo nos duró 2,8 km. A partir de ahí, empezó el verdadero cachondeo

• Distancia: 45,95 km

• Altura Máxima: 898,49 m

• Altura Mínima: 122,22 m

• Desnivel Positivo: 2.027,90 m

• Desnivel Negativo: 2.020,69 m

• Desnivel Acumulado: 4.049,59 m

Como no podía ser de otra manera, la cosa había que tomársela con calma e intentar disfrutar del espectacular paisaje que había durante todo el recorrido, lástima que la niebla nos fastidió durante buena parte del trayecto. Cada 5 km aprox. teníamos los avituallamientos (líquidos y sólidos), que como es habitual en estas carreras, acompañados por una legión de voluntarios, que en todo momento te falcilitaban las cosas y se interesaban por los corredores.

Personalmente, yo iba genial, mis piernas respondían y mi cabeza mucho mejor, pero sobre el km 26, empecé a notar molestias en el estómago, o lo que es lo mismo……a vomitar cada vez que tomaba algo de líquido. No me vine abajo, ni pensé los kms que quedaban, a pesar de que en uno de los avituallamientos me aconsejaran que me retirara y ahí es cuando me “encabroné” un poco, pero conmigo mismo, ya que los voluntarios cumplieron a la perfección ocupándose de tod@s los participantes, quedándose un poco sorprendidos cuando les respondí: “soy un Tragaleguas, ostias”.

A partir de ahí creo que es cuando empezó mi carrera, y aunque tuve que hacer estiramientos un par de veces y “potar” otras tantas, afronté los últimos 10 km con ganas de demostrarme a mí mismo de que el “infierno” puede llegar a ser bonito. Los últimos 3 km espectaculares, ya que eran entrando al pueblo, y no había paisano que al ver pasar a un corredor, no le diese ánimos, siendo la entrada en meta algo impresionante ya que faltando unos metros oigo por megafonía: Dorsal 52 Roberto Alonso, Tragaleguas y me dije para mí…..ostias.

Por su parte Enrique también disfrutó de la prueba, a pesar de no haberse recuperado de la bronquitis, y aunque en un principio comentó que si se veía mal abandonaba, sacó de nuevo la casta que nos tiene acostumbrados y terminó, a pesar de que al final sus rodillas le molestasen un poco.

7:49:53 +3:35:31 DE FRUTOS TORRES Enrique DEPORTIVO TRAGALEGUAS C
8:29:23 +4:15:01 ALONSO VILLARROEL Roberto TRAGALEGUAS B
En definitiva una más, y por mi parte decir que el próximo año si la salud y las “putas” guardias del curro me lo permiten, volveré pero no para hacer la de 46 km, sino a por la de 125 km. ¿Os animais?

Saludos y muchos kms